viernes, 26 de diciembre de 2014

TERESA - JÉRICA. COMIDA DE NAVIDAD

RÍO PALANCIA
Me ha gustado la crónica que ha escrito Diego López en una red social y me quisiera incluirla en nuestro blog de crónicas. Estoy seguro de que no le parecerá mal.

Travesía por la comarca del Alto Palancia desde Teresa hasta Jérica. Con el grupo senderista Sendeando, compartimos una agradable mañana de sol invernal caminando por el lecho del río Palancia, a veces seco y otras no, y por su margen, desde la ciudad castellonense de Teresa a la de Jérica. Caminaremos muchas veces entre cultivos, sobre todo de olivos, hasta llegar al bello paraje de la Fuente de Randurías en Jérica (Castellón).

El curso alto de este río presenta un agua de gran pureza hasta la localidad de Bejís, pero los vertidos urbanos de diversas poblaciones como Teresa, Viver o Jérica empobrecen la calidad de las aguas. Denota el paisaje fluvial como cuanta más pureza y más cantidad del agua, mayor verdor.

Y tras una deliciosa excursión, comemos todos en un restaurante con ya amigos de aventuras. Sólo queda esperar a la próxima para volver a reunirnos en nuestra pasión. Fotos AQUÍ

Hasta aquí las palabras de Diego y sus fotos. 

Después de la excursión, la comida y los brindis, realizamos un sorteo entre los asistentes.

Los bastones telescópicos obsequio de DEPORTES ALVARADO fueron a las manos de Paz O. Una vasca-lenciana de pro. El calendario con fotos pirenaicas de PATAGONIA lo consultará Ana B.

Sorteamos dos camisetas Sendeando que lucirán en breve Fernando A. e Inma S. Vendrán gratis a una excursión dominguera con la compañía que elijan Teresa R. y Caterina M.

Finalmente la "suertuda" que va a venir gratis a SEIS EXCURSIONES con nuestro BONO 5+1 es Maribel A. ¡Muchas gracias por vuestra compañía este 2014!

Fotos de Sendeando AQUÍ

martes, 9 de diciembre de 2014

COLLADO DE LA NEVERA - SUERAS

CASTILLO DE MAUZ
Es difícil destacar algo de la ruta de ayer. Un castillo, un paraje, un rincón,... Destaco la foto del castillo de Mauz porque es la última imagen que vimos antes de llegar a Sueras. Además me vino a la memoria que por la mañana habíamos estado en la nevera de Espadán y parecía que habían pasado varios días. Espadán es intenso no solo por su gran extensión sino por la variedad de rincones que puedes encontrar. Llevo muchos años pateándolo y cada vez me sorprende más. Como decía, empezamos en el collado que separa Algimia de Almonacid de Alcudia de Veo; junto a la nevera de Espadán. Desde su construcción en el siglo XVIII servía tanto al valle del Palancia como a la Plana de Castellón. De planta circular, tiene una abertura en la cubierta para la carga de la nieve. Desde este punto iremos bajando a la sombra del Rápita hacia el lecho del río Veo. Junto a él destaca el despoblado del Jinquer y los restos de su castillo. Esta antigua aldea morisca perdió sus habitantes en dos sucesos funestos de nuestra historia. A consecuencia de la expulsión de los moriscos, la primera vez, y, definitivamente, durante la guerra civil.
Una vez repuestas las fuerzas comenzamos la subida más larga del día. Con el río a nuestra derecha se iban sucediendo los campos de secano con la grata sorpresa de una de las maravillas de este lugar: un pequeño bosque de castaños, una rareza por estas tierras. Continuamos la subida hasta llegar al cruce de caminos del collado cercano al Rápita. Las fuertes lluvias y vientos de los últimos días nos obsequiaron con una extraordinaria visibilidad. Del Gegant de Pedra vigilante podíamos distinguir cada uno de sus pliegues y, a nuestros pies, podíamos ir enumerando valles y colinas. Con estas llegamos al punto más alto del recorrido, la nevera de Cuatro Caminos. Es de una fábrica impresionante y conserva todavía casi todos sus elementos, salvo la cubierta. Hasta principios del siglo XX estuvo en funcionamiento.
Cambiamos de vertiente y pudimos ver el castillo de Mauz y el Barranco de Castro que era nuestro siguiente punto de referencia. Antes, paramos a comer junto a la atalaya cercana a las trincheras de Villamalur. Estábamos en el eje XYZ o línea Matallana que constituyó el frente a finales de la guerra civil. Continuamos por esta línea hasta encontrar las marcas rojas y blancas del GR-36 que seguimos hasta el Barranco de Castro. Solo teníamos que seguirlo hasta encontrar la fuente del mismo nombre.
Cercano al despoblado el grupo pudo elegir entre dos opciones: continuar caminando junto al barranco o subir al castillo. No llegan a doscientos los metros de desnivel que hay que salvar para llegar al Castillo de Mauz. Sin embargo, la vista sobre La Plana es impresionante. Ya desde el espacio inferior podemos disfrutar del paisaje que nos rodea. En la parte alta destaca la torre de homenaje y el patio de armas. El recinto intermedio, donde se realizaban las tareas cotidianas, conserva restos de dependencias y recintos varios. En la parte más baja, el albacar, se situaban los corrales y era donde se refugiaba la población que vivía al exterior de sus murallas.
Solo nos quedaba seguir bajando hasta llegar a Sueras. Un rato para el avituallamiento sólido y, sobretodo, líquido y para casa. Claro que todavía teníamos que sortear los bastones telescópicos obsequio de DEPORTES ALVARADO. Marga S. se los llevó y, estoy seguro, le va a dar mucha caña.

Fotos de Ramón AQUÍ y de Sendeando AQUÍ. En nuestro facebook también hay "compartidas" un montón de fotos más.